Categories
Éxito, Finanzas, Metas

“Debes ganar control sobre tu dinero o la falta del mismo te controlará a ti”.

                       Dave Ramsey.

Los hábitos en el manejo del dinero buenos o malos los adquirimos con el tiempo, se convierten en algo repetitivo ya sea por que imitamos los comportamientos de nuestros padres, o por que los fuimos adhiriendo como una forma de normal de rutina.

La cuestión es que, aunque todo nos parezca normal muchos de nuestros hábitos son los gestores de la pobreza o de no poseer una estabilidad económica y de riqueza.

Estos son algunos de los principales hábitos que reducen la posibilidad de crecer financieramente y te mantienen pobre.

1. Gastar mas de lo que ganas

Este es de los más recurrentes errores en el manejo del dinero, haciendo compras anticipadas o enrolándonos en membresías, y pagos diferidos. El presupuesto mensual no alcanza para cubrir esos pagos lo que genera una brecha entre nuestros ingresos y egresos. Con el tiempo se convierte en mayor endeudamiento y pagos de intereses que elevan el valor de lo que hemos adquirido por consumo

2. Las compras impulsivas en tiendas y online:

Muy asociado al anterior punto, el bombardeo diario de los medios con publicidad que nos impulsa a comprar productos que en realidad no necesitamos, o que poco vamos a utilizar. Cuando salimos a un centro comercial con la justificación de que es solo para distraernos un rato, realmente nuestro inconsciente nos esta llevando a a alimentar ese mal hábito  y por una asociación impulsiva terminamos comparando ese objeto que horas o días atrás vimos en una publicidad en las redes sociales o en la tv.

3. Querer aparentar para impresionar a otros

Vivimos en una sociedad de apariencia e impresión, donde buscamos más la aceptación de otros que la autoestima y valoración personal. Las marcas se convierten en un punto de medida y al caer en ese hábito de impresionar terminamos comprando y consumiendo más de lo que deberíamos. Entonces se nos genera la necesidad de cambiar el Celular por que salió la nueva versión, o cambiar el carro que todavía ni se termina de pagar para asumir un crédito mayor por el siguiente.

4. No llevar un control de gastos e ingresos:

Creo que este es el mal hábito  número uno, si tienes unos ingresos recurrentes igualmente debemos tener un control de gastos permanente, de esta manera saber con cuanto se cuenta, para que esta destinado y como distribuirlo en nuestro presupuesto mensual.

Es fácil encontrar aplicaciones que nos ayudan a llevar ese control y registro diario, para ser conscientes de donde estamos siendo impulsivos y donde estamos correspondiendo a un plan mensual.

5. Depender de una sola fuente de ingresos:

Si dependemos de un cheque periódico, no podremos incrementar nuestra calidad de vida y avanzar a una libertad financiera. Por ello es importante que paralelo a nuestro trabajo diario generemos otras fuentes de ingresos adicionales. Y no depender de una sola. Te recomiendo ver el próximo video en el que te recomendare algunas ideas de negocio alternativas, para generar ingresos pasivos.

6. Pagar siempre a crédito

El uso indiscriminado de las tarjetas de crédito, es de los mayores errores que se cometen, no solo afectan tu bolsillo, sino que también afectan tu capacidad de pago y tu puntaje crediticio. Las tarjetas de crédito son uno de los principales enemigos de un buen manejo de nuestras finanzas. Ya que ellas están para consumo con pagos diferidos y altos intereses. Entre más compras a crédito mayor costo por el artículo. Y menor la posibilidad de contar con un dinero extra que debería estar destinado a tu ahorro o inversión.

7. No tener un fondo de ahorro

El 90 por ciento de la población latina no tiene un hábito  de ahorro y el 80 por ciento de los estadunidenses tampoco. Este mal hábito  de no destinar un porcentaje de los ingresos al ahorro hace que la vida se convierta en como lo llama Kiyosaki: vivir la carrera de la rata, trabajar para pagar y vivir para trabajar y repetir el  mismo ciclo hasta que mueres.

8. No tener metas financieras:

Las metas, los planes, los objetivos financieros, como los quieras llamar son importantes en un mundo en el que el dinero es relevante para la subsistencia, la calidad de vida y la felicidad. Si no tienes el hábito  de plantearte metas, como podrás saber a donde quieres y puedes llegar. 

No tener un hábito  de plantearte cambios y logros, es como levantarse para dormir y dormir para levantarse.

9. No saber cocinar, o saber y no hacerlo

Parece gracioso, pero es cierto, si no sabes cocinar aprende, ya lo puedes hacer con cursos en línea o recetas en YouTube. Y si lo sabes hacer practícalo mas frecuentemente, ya que este es uno de lo medios por donde  el dinero se va más rápido y no te das cuenta, cuando consumes y comes mas por fuera de casa, café hamburguesas o pides domicilios con sobrecargos.

Entonces lo que si debes hacer:

  • Has seguimiento a tus gastos te tomara 10 minutos diarios. Utiliza una tabla de Excel o aplicaciones en línea: como wallet, o gestor de gastos.
  • Ahorra, ahorra e invierte tus ahorros. No ahorres para comoeter el mismo error, de darte gustos y gastar, debes ahorrar con una intencion: la de hacer que tu dinero se multiplique.
  • Utiliza el crédito solo para apalancarte, y págalo a tiempo para mejorar tus relaciones con los bancos. Cuando ves un oprotunidad e negocio y puedes acudir al credito y pagarlo a tiempo sin intereses, estas apalancandote. Y al tiempo mejorando tu puntaje de credito.
  • Aplica la regla del 70 -20 -10: 70 % de tus ingresos para todos tus gastos fijos, 20 % para pagar tus deudas y 10 % para el ahorro y la inversión.
  • Genera al menos una fuente de ingresos alternativa, acude a los medios que hoy dia nos posin=bilitan generar otras fuentes de ingresos, habara que investigar primero, hacer una lluvia de ideas y de ahi comenzar de apoco.
  • Crea y cumple un presupuesto, mensual y anual. Ser consciente de cuanto tienes, cuanto gastas y en que, es la mejor manera de administrar y gestionar tu dinero.
  • Podras tener el control de tu dinero si aplicas estos habitos, “sin prisa pero sin pausa.”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *